CAPERUCITA ROJA

Versión del clásico “Caperucita Roja” por el destacado autor francés Joel Pommerat.

Esta versión pone en escena la complejidad del tiempo moderno y cómo este afecta a las relaciones intergeneracionales, falta de lazos afectivos y abandono a la tercera edad. Se ven enfrentados los grandes miedos e inquietudes de la madre y la hija, develando sus fragilidades y fortalezas.

La historia trabaja sobre el vínculo de la comunicación familiar y resalta lazos afectivos como eje fundamental del desarrollo identitario, indagando profundamente en el deseo y el miedo.

El relato toma como eje central el tránsito de la niña entre su casa y la casa de su abuela, donde el camino es mucho más que un desplazamiento geográfico: salir significa crecer. Como en el cuento, el público se encontrará con la Caperucita Roja, la mamá, la abuela y el lobo.

La Caperucita Roja desea por sobre todo salir de su casa, pero su mamá está tan ocupada que apenas tiene tiempo para su hija y no quiere que salga sola. La niña se aburre y se siente sola. Afuera hay peligro, el bosque que representa lo desconocido. Debido a la insistencia de Caperucita, la mamá promete dejarla ir a ver a su abuela si es capaz de cocinarle un flan. La niña logra el desafío y la madre cumple su promesa. En el trayecto, la niña se debate entre el miedo de estar sola y su deseo de crecer.

Ficha artística

Dramaturgia: Joel Pommerat

Dirección: Benjamín Bravo Luengo

Traducción: Millaray Lobos

Elenco: Paloma Toral, Diego Varas, Nicole Espinoza

Jefe técnico e iluminación: José Luis Cifuentes

Música: Ricardo Zavala

Operador sonido: Octavio Oshee

Diseño: Los Contadores Auditores

Producción: Alessandra Massardo